Karl Amadeus Hartmann
Compositor
Karl Amadeus Hartmann fue uno de los pioneros de la nueva música en Alemania después de la «Hora Cero». Como iniciador de la serie de conciertos [musica viva] en Múnich, apoyó a innumerables compositores y compositoras jóvenes. Él mismo no contó nunca con un respaldo comparable: tras sus éxitos iniciales a comienzos de los años treinta, los nacionalsocialistas prohibieron la interpretación de sus obras. La muerte prematura de Hartmann en 1963 provocó que tanto él como todos sus logros cayeran temporalmente en el olvido.
Karl Amadeus Hartmann, nacido en 1905, estudió trombón y composición en la Staatliche Akademie der Tonkunst de Múnich después de abandonar sus estudios de profesor. Cuatro años más tarde vieron la luz sus primeras obras, como la [Misa Profana], la [Jazz-Toccata und -Fuge], así como la «ópera de cámara cómico-fantástica» [Wachsfigurenkabinett] (Gabinete de figuras de cera). Después de la toma del poder por parte de los nacionalsocialistas, Hartmann se refugió en un exilio interior. Aquí desarrolló un consistente lenguaje musical de la resistencia antifascista como una contrarreacción al racismo y la guerra, así como una adhesión al arte que había sido tildado de «degenerado». Durante estos tiempos difíciles, en los que Hartmann dio clases particulares con Anton Webern en 1942 y en los que su mujer Elisabeth y sus suegros se ocuparon fundamentalmente de su sustento, el compositor pudo disfrutar de algunos éxitos en el extranjero. Entre ellos figuraron el estreno de su poema sinfónico [Miserae] en el Festival de la Sociedad Internacional para la Nueva Música en Praga (1935), el primer premio en el Concurso de Música de Cámara «Carillon» en Ginebra (1936), la interpretación de su Cuarteto de cuerda núm. 1 en Londres (1938), así como el estreno de su [Concerto funebre] en St. Gallen (1940). En septiembre de 1945, Hartmann ocupó un puesto como dramaturgo en la Ópera Estatal de Baviera en Múnich que mantendría hasta su muerte. Los primeros conciertos de [musica viva] se celebraron ya en otoño de ese mismo año, aunque no se bautizarían con este nombre hasta la temporada 1947/48. A pesar de su infatigable compromiso con la nueva música, de su actividad como asesor de programas en la Radio Bávara y como coeditor de la [Neue Zeitschrift für Musik], Hartmann nos dejó una extensa producción de ocho sinfonías, conciertos, la (incompleta) [Escena cantada] a partir de textos de [Sodoma y Gomorra] de Jean Giraudoux para barítono y orquesta, así como música de cámara y obras para piano.
