Noah Bendix-Balgley: un retrato

El primer concertino desempeña en la orquesta un papel especialmente lleno de responsabilidades. No sólo debe dominar pasajes a solo de un virtuosismo extremo −como, por ejemplo, en los poemas sinfónicos de Richard Strauss−, sino que también ha de favorecer la comunicación entre el director o directora y la orquesta. Puede aprender más cosas en este breve retrato de Noah Bendix-Balgley, que pasó a ocupar este puesto dentro de los Berliner Philharmoniker en 2014.

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